Jugadores lasalianos
Estos días, la prensa deportiva está dedicando muchas líneas a varios jugadores del Madrid por protagonizar una noche inolvidable y, tras ganar al Partizan, clasificarse para seguir luchando por el título de la Euroliga. Dos de los jugadores más alabados tienen raíces lasalianas.
El Chacho, Sergio Rodríguez, aprendió a jugar al baloncesto en La Salle San Ildefonso, el colegio de su padre. En el suyo no había equipo. Hoy todavía tiene relación a través de los diferentes campus que se organizan en la isla.
Sergio Llull cuenta qué supuso para él estudiar en La Salle Maó:
«Para mí La Salle es ilusión. Es amistad. Es compromiso. Es un continuo aprendizaje de valores muy importantes como la solidaridad, el compañerismo, el esfuerzo, el sacrificio, la humildad. Valores que deberíamos poner en práctica durante toda la vida. Guardo un muy buen recuerdo de mi paso por el colegio. Hice grandes amigos y disfruté mucho aprendiendo y formándome como persona. En La Salle es donde aprendí a jugar al baloncesto, donde desarrollé mi pasión por este deporte que me ha llevado a estar en el lugar donde estoy hoy. Siempre estaré agradecido a todos los integrantes del colegio. La Salle es el presente y el futuro.»
Gracias a los dos por vuestro trabajo y por vuestras palabras. Seguimos trabajando para que todos nuestros alumnos y alumnas se sientan así a diario en nuestros centros.