Jugar pensando
El desarrollo del pensamiento lógico en los niños y niñas beneficia la atención y la concentración, el desenvolvimiento de un pensamiento crítico, reflexivo, aumenta la capacidad del uso del lenguaje y los números, aumenta la autoestima y beneficia la flexibilidad mental.
Mientras disfrutamos jugando, necesitamos estar atentos, cuestionar el por qué y el cómo, cumplir normas, establecer relaciones, seguir pautas, abrirse a nuevas formas de pensar, a ser creativos… Habilidades que favorecen el desarrollo integral de los niños y niñas y son aplicables a otros aspectos de la vida.
El juego nos permite ofrecer un ambiente cotidiano óptimo para el razonamiento lógico en la mejor compañía; los amigos. Comenzamos a reproducir patrones (palos de madera, policubos, construcciones, formas geométricas, juegos colour code…), para continuar con secuencias temporales (actividades cotidianas, cuentos, etc.) y más adelante retos motores. Al mismo tiempo se van alternando juegos que también nos ayudan a trabajar el pensamiento lógico: rompecabezas, construcciones, distintos juegos de mesa, pastiempos, …
¿Cuál es el reto? ¡No importa! Observa, relaciona, descubre, prueba, verbaliza, generaliza, razona, encuentra nuevas estrategias… ¡el reto es tuyo!
LUISA PÁJARO
Maestra de Educación Infantil